En plena era del internet de las cosas, todos nuestros dispositivos informáticos permanecen conectados a la red prácticamente las veinticuatro horas, y, de hecho, casi todos ellos están diseñados desde el comienzo para que así sea. La informática ya no se entiende sin una conexión continua a internet, de forma que incluso nuestra música o nuestras películas favoritas acostumbran a estar almacenadas en servidores en la nube situados al otro lado del mundo.
La conexión constante de nuestros dispositivos presenta muchísimas ventajas, nos vincula mejor con el mundo y hace que nuestra vida sea más cómoda, pero también presenta riesgos críticos para nuestra privacidad que, si no se solucionan de forma eficaz, pueden filtrar datos vitales como nuestros nombres de usuario, nuestras contraseñas, o los números de nuestras tarjetas de crédito, con el daño personal, profesional y económico que esas filtraciones pueden acarrear.
Para remediarlo, tus dispositivos deberían contar sí o sí con estas 7 características de privacidad y seguridad en la red:
1. Contraseñas robustas
No es algo que esté incorporado en tus dispositivos per se, pero es algo que debes tener claro para que los mecanismos de seguridad sean eficaces. A estas alturas ya es inconcebible que nadie siga usando contraseñas sencillas como el nombre de su mascota o ‘abcd’. Este tipo de claves son extremadamente vulnerables. Para garantizar la seguridad de tus dispositivos, es necesario que uses contraseñas robustas en todas tus aplicaciones.
2. Una VPN
La herramienta más popular actualmente para garantizar la privacidad al navegar por internet consiste en una VPN, que es una herramienta con la que podrás encriptar de forma segura todos los datos que envíes o recibas. Algunos portátiles ya vienen con una VPN integrada en su set de aplicaciones por defecto. Este tipo de equipos son una de las mejores elecciones en materia de ciberseguridad.
3. Lector de huellas dactilares
Asegúrate de que tú, y solo tú, tienes acceso a tus equipos informáticos gracias a su sistema de bloqueo mediante huellas dactilares. Fabricantes como Huawei o Apple ya están integrando lectores de huellas en el botón de encendido o en el touchpad de sus portátiles para que puedas contar con la garantía de tu privacidad en todo momento y asegurarte de que ninguna persona revisa tus archivos cuando no estás presente.
4. Sistemas de reconocimiento facial
De forma similar, y especialmente en el caso de Apple, los sistemas de reconocimiento facial a través de la webcam están cada vez más a la orden del día y constituyen otra de las mejores maneras de garantizar que solo tú puedes acceder a tus equipos, ya se trate de portátiles como de teléfonos. Es por esto que el Face ID de los iPhones es tan popular, y esta medida se está extendiendo gradualmente a muchos otros fabricantes.
5. Interruptores físicos para la cámara y el micrófono
Tener una webcam y un micrófono está muy bien, y por eso son características esenciales que deben tener todos nuestros equipos. Lo que no está tan bien es que un hacker pueda acceder a ellos de forma remota y observarnos o escucharnos en nuestra intimidad. Para garantizar que tu privacidad queda a salvo incluso si tu equipo sufre un hackeo, asegúrate de comprar dispositivos con interruptores físicos para la cámara y el micrófono, como ocurre en el caso de los ordenadores Purism.
6. Un antivirus profesional
Como decíamos, los dispositivos informáticos pueden volverse en nuestra contra si sufren un hackeo. Para prevenir esto, una de las mejores herramientas con las que puedes contar es un antivirus de corte profesional que mantenga el malware a raya y tus puertos seguros. La mayoría de los antivirus de primera línea vienen con un firewall incluido para reforzar aún más la seguridad de todas tus conexiones.
7. Pantallas antiespía
Por último, todas las herramientas de ciberseguridad pueden terminar resultando inútiles si alguien puede simplemente pasar por detrás de tu pantalla y mirar lo que haces por encima de tu hombro. Las pantallas antiespía solucionarán este problema, haciendo que solo la persona que esté inmediatamente frente a la pantalla –es decir, tú– pueda ver su contenido. También es posible adherir filtros antiespía de terceros para las pantallas de tus teléfonos o tus ordenadores si no los tienen incorporados de fábrica.
