He de confesarlo, siempre me han gustado las Matemáticas. De hecho he impartido durante muchos años clases en las que los números, las operaciones, las hipótesis, o las tesis, formaban parte del diario devenir. Tal vez por ello no he podido olvidar lo que me ha mantenido activo y, de vez en cuando, propongo un desafío a los que leen Batiburrillo.net. Esta es la propuesta de hoy. ¿Te atreves a resolver el problema que viene a continuación?
En el Val do Mao hay una tienda, con muchos años de existencia y sin ninguna renovación hecha en su largo periplo, que vende de todo. El señor Ulpiano, el propietario, es de los pocos tenderos que sigue aún vendiendo productos «a granel». Tiene seis garrafas de aceite, de 15, 16, 18, 19, 20 y 31 litros respectivamente. Cinco son de aceite de oliva y uno de aceite de soja.
El pasado martes fue un día de suerte para Ulpiano. A pesar de que tenía todos los recipientes llenos, le vendió a Pepe do Carrizo una importante cantidad de aceite de oliva y a Doña Virtudes el doble de esa cantidad. Con eso, se quedó sin aceite de oliva. El producto vendido lo repartió en botellas de 1 litro.
¿Cuántos litros de aceite de soja le quedan al tendero?
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Solución
Los que no sean capaces de resolver el problema o quieran comprobar si su solución es válida, pueden leer lo que viene a continuación:
La cantidad de aceite «despachada» debe ser múltiplo de 3, resultado de vender primero una cantidad y después el doble. Si dividimos las seis capacidades (15, 16, 18, 19, 20 y 31) entre 3, obtenemos respectivamente de restos 0, 1, 0, 1, 2, 1. La única forma, con los restos obtenidos, de que la suma de cinco de ellos sea múltiplo de 3 es 0, 1, 0, 1, 1. Nos quedará, por consiguiente, el de resto 2, que corresponde a la garrafa de 20 litros, que será la de aceite de soja.