Todos sabemos lo que es Coca Cola, la madre de esa bebida azucarada (o sin azúcar) que lleva en lo alto de la ola desde hace muchísimos años. Sabemos también que la matriz de la bebida es una empresa de gran poderío económico. En Italia hay una web, CocaColla.it, que se ocupa desde el año 2010. Un grupo de jóvenes creó este espacio con el fin de recoger muestras de arte, de diseño, de estilo de vida, de las nuevas tendencias en la red, entre otras pretensiones.
El pasado día uno de febrero los responsables del sitio han recibido un comunicado de Coca Cola en el que se les invita a que cierren la web o utilicen otro nombre y dominio para sostenerla. El motivo está en que los visitantes del sitio pueden confundirse y pensar que están visitando un espacio italiano de Coca Cola. Disponen de quince días para hacerlo.
Los chicos que mantienen el sitio no saben aún la medida que van a tomar con respecto a la demanda propiciada por la poderosa multinacional con sede en Atlanta. Están pulsando la opinión de sus seguidores a través de Twitter. No tienen en principio la intención de recurrir a un abogado. Es lo que nos cuentan en Corriere della Sera, en donde hablan también del caso que se dio en Bolivia con respecto a una bebida, puesta en el mercado, llamada Coca Colla y sobre la actuación pasiva de la empresa de Atlanta, que no adoptó ninguna medida con el fin de impedir su venta.