El consumo de frutos secos está considerado muy bueno para mantener una buena salud. Según los resultados de un estudio, publicado hace dos años, el consumo diario de nueces, pertenecientes al grupo de los citados frutos secos, contribuye a un mejor mantenimiento intestinal y a disminuir los riesgos de enfermedades cardíacas.
El comer al menos dos nueces diarias es muy bueno, tal como informan los protagonistas del estudio, publicado en Medical News Today. Las nueces, debido a su contenido en grasas insaturadas, contrarrestan las acciones producidas por los alimentos que contienen grasas saturadas.
Beneficios que produce el consumo de nueces
Los beneficios cardiovasculares son notables, sobre todo en lo relativo a la presión arterial, y a otros aspectos relacionados con el consumo de selenio. El ácido alfa-linolénico, un tipo de ácido graso omega-3, es el que activa este beneficio, una pequeña y saludable presión arterial. Las nueces son además ricas en proteínas y en minerales, destacando en este grupo el calcio y el hierro.
Kris-Etherton, uno de los responsables del estudio, ha dicho al respecto: «Además de analizar factores como los lípidos y las lipoproteínas, queríamos analizar la salud intestinal. También queríamos ver si los cambios en la salud intestinal con el consumo de nueces estaban relacionados con mejoras en los factores de riesgo de enfermedad cardíaca«.
¿Cómo se llevó a cabo el estudio?
Para llevar a cabo el estudio se seleccionaron al azar 42 personas, con edades comprendidas entre 30 y 65 años, que destacaban por su obesidad, debido a su peso excesivo. Se les sometió a una dieta típica durante dos semanas. A partir de ahí, se constituyeron tres grupos: uno comió nueces enteras, otro ingirió ácido alfa-linolénico en la proporción que contendrían las nueces que tomaron los del primer grupo, y en un tercero el ácido alfa-linolénico se sustituyó por ácido oleico. Cada uno de los miembros del segundo y del tercer grupo no consumió ninguna cantidad de nueces.
La dieta, en los tres grupos, se mantuvo activa durante seis semanas. Al finalizar el primer periodo, se llevó a cabo un cambio de grupos, y así se hizo hasta que cada grupo de participantes pasó por cada una de las tres modalidades de dieta.
En cada caso se hicieron análisis de las heces fecales de los participantes, con el fin de averiguar los contenidos bacterianos. Se comprobó, en cada análisis, que las personas que consumían nueces tenían un mejor contenido en las bacterias intestinales. También se vio que la salud de sus corazones era mejor.
Conclusión
Vistos los resultados obtenidos ya sabemos lo que debemos hacer. El tomar en momentos determinados del día pequeñas cantidades de nueces es muy saludable. Con ello permitiremos que nuestro intestino trabaje mejor, gracias a los beneficios que reciben las bacterias que forman parte de él, y el corazón funcionará mejor porque las arterias dejarán que la sangre circule con total libertad.