La llegada de la nueva temporada escolar y el reinicio de las actividades profesionales requieren de la compra o renovación de todo tipo de recursos. En una sociedad cada vez más digitalizada las necesidades de acceso a la red y softwares de todo tipo se han incrementado de forma exponencial.
La compra de un ordenador portátil puede generar algún que otro dolor de cabeza. Sobre todo si los compradores no cuentan con demasiados conocimientos al respecto. Contar con algunas nociones básicas puede facilitar mucho el proceso de selección. En la página web de Portatilea.com te pueden ayudar a elegir el mejor ordenador portátil según tus necesidades.
A continuación compartimos contigo tres consejos básicos para identificar el ordenador perfecto para hacer frente a los retos que se presentarán durante el próximo año. ¡Presta atención!
Presupuesto disponible: Analiza los precios y las funcionalidades de tu ordenador
Dentro del mercado existe una amplia gama de precios. Desde mini ordenadores portátiles que rondan los 200€ hasta modelos con grandes potencialidades que superan los 4.000.
El precio puede funcionar como un buen indicador para identificar el alcance de cada modelo. Aquellos portátiles que están orientados a un uso básico, es decir, navegar por la red o editar documentos sencillos, se adaptan a presupuestos más reducidos.
Precio y potencial están íntimamente relacionados. Tener esto en cuenta es importante. Para escoger una opción que se adapte a nuestras necesidades es importante saber con tanta exactitud como sea posible el uso que se le dará a partir de su adquisición.
Como idea general, podemos definir tres niveles de calidad y precio:
Ordenadores portátiles básicos
Cuentan con un presupuesto que oscila entre los 200 y los 1.000 euros. Están preparados para ofrecer una buena experiencia de usuario en labores básicas: Navegación en Internet, editar documentos o enviar y recibir e-mails.
Ordenadores portátiles de gama media
Los encontramos dentro de un marco de precios situado entre los 1.000 y 2.000 euros. Cuentan con un hardware algo más robusto. Son recomendables para desarrollar actividades que no consumen muchos recursos: Edición de vídeos sencillos, retoque de fotografía, instalación y uso de softwares de todo tipo… Son una buena opción para aquellos usuarios que necesitan cubrir necesidades básicas e intermedias a diario: Estudiantes o trabajadores freelance, por ejemplo.
Ordenadores portátiles de gama alta
Los modelos de gama alta suelen contar con presupuestos que superan los 2.000 euros. Este tipo de ordenadores cuentan con procesador de última generación, tarjeta gráfica robusta, disco duro de mayor capacidad, una memoria RAM potente… Son especialmente recomendables para profesionales especializados que trabajan a menudo con softwares y formatos que consumen grandes recursos.
¿Cuál es el tamaño de pantalla más adecuado?
El tamaño de la pantalla constituye otro factor de decisión importante. Para escoger la mejor solución será imprescindible identificar nuestras necesidades o nuestra rutina de uso.
En el mercado podemos encontrar modelos con pantallas que oscilan entre las 10 y las 17 pulgadas. ¿Cuál será su uso? Si vas a trabajar con él durante largas jornadas cada día es recomendable optar por una pantalla de grandes dimensiones que te proporcione una experiencia de usuario cómoda y no te obligue a forzar la vista demasiado.
¿Lo transportarás a diario? Si es así, una alternativa más reducida y ligera te proporcionará un extra de comodidad. Aún así, si lo vas a utilizar durante largos periodos de tiempo cada día, lo más recomendable será huir de las soluciones demasiado portátiles. Ten en cuenta que utilizar las aplicaciones en pantalla pequeña es más difícil.
En este caso, quizá sería recomendable un modelo que cuente con una pantalla media, es decir, de entre 13 y 15 pulgadas.
¿Cuánta potencia y memoria necesitas?
En términos generales, lo más recomendable es escoger un modelo que cuente con la máxima potencia posible. Esto garantizará un largo período de vida útil y menos restricciones de uso. Ahora bien, ¿cuánta potencia exactamente necesitarás? Para eso deberás saber con exactitud qué tipo de funciones desarrollarás a diario con tu ordenador. En función de cuáles sean contarás con más o menos necesidades en materia de potencia y capacidad de almacenamiento.
Apostar por una solución que integre una unidad SSD en lugar de la clásica HDD puede ser una buena opción. Ello puede suponer un gasto adicional, pero la diferencia entre ambas alternativas en términos de velocidad es llamativa. Eso sí, en caso de comprar un portátil con una unidad SSD ten en cuenta que lo más probable es que cuente con una capacidad de almacenamiento más reducida por lo que puedes complementarlo agregando una memoria externa.
Por otro lado, la memoria RAM general en los portátiles de gama media es de 4GB. Un rango bastante aceptable si de lo que se trata es de desempeñar funciones básicas como navegar en Internet o gestionar softwares ligeros. Sin embargo, para funciones más complejas como el uso de videojuegos o la edición de vídeo profesional, es preferible contar con una ram de 8 o 16GB.