La osteoterapia es una disciplina que se engloba dentro de la medicina alternativa y que se basa en la manipulación manual de los tejidos corporales para restaurar y mantener el equilibrio del organismo. Concretamente se centra en el tratamiento de las disfunciones de la estructura músculo-esquelética, como los músculos, los huesos, las articulaciones, los ligamentos y los tendones.
Tal y como confirman desde la clínica de fisioterapia en Pozuelo “Fisvital”, la osteoterapia puede ser de gran ayuda para la recuperación de lesiones físicas, ya que tiene como objetivo devolver la movilidad y la funcionalidad a la zona afectada, aliviar el dolor y la inflamación, mejorar la circulación sanguínea y linfática, y estimular el sistema inmunológico y nervioso. Además, la osteoterapia puede prevenir futuras lesiones y mejorar el rendimiento deportivo, al corregir las alteraciones posturales y favorecer la coordinación y el equilibrio. Por este motivo, en esta clínica ofrecen complementariamente tratamientos de osteoterapia en Pozuelo de Alarcón a sus pacientes en rehabilitación.
Tipos de lesiones físicas que puede tratar la osteoterapia
La osteoterapia puede tratar una gran variedad de lesiones físicas, tanto agudas como crónicas, que afectan al sistema músculo-esquelético. Algunas de las lesiones más comunes son las siguientes:
- Lesiones musculares: afectan al tejido muscular, como los desgarros, las contracturas, las distensiones o las roturas fibrilares. La osteoterapia puede ayudar a relajar y estirar el músculo lesionado, reducir el espasmo y el edema, y favorecer la cicatrización y la regeneración del tejido.
- Lesiones tendinosas: afectan al tejido tendinoso, que conecta el músculo con el hueso, como las tendinitis, las tendinosis o las roturas. La osteoterapia puede ayudar a desinflamar y descontracturar el tendón lesionado, mejorar su elasticidad y resistencia, y prevenir la degeneración y la calcificación de este.
- Lesiones ligamentosas: daños en el tejido ligamentoso, que une los huesos entre sí, como los esguinces, las distensiones o las roturas. La osteoterapia puede ayudar a disminuir el dolor y la hinchazón, restablecer la estabilidad y la movilidad articular, y fortalecer los ligamentos para evitar la laxitud y la inestabilidad.
- Lesiones articulares: relacionadas con las articulaciones, como la artrosis, la artritis, la bursitis o la capsulitis. La osteoterapia puede ayudar a mejorar el rango de movimiento y la lubricación articular, disminuir la rigidez y el roce, y reducir la inflamación y el dolor.
- Lesiones óseas: afectan al tejido óseo, como las fracturas, las fisuras o las osteoporosis. La osteoterapia puede ayudar a acelerar el proceso de consolidación y remodelación ósea, mejorar la vascularización y la nutrición del hueso, y prevenir la pérdida de masa y densidad ósea.
Técnicas de osteoterapia para la recuperación de lesiones físicas
La osteoterapia utiliza diferentes técnicas manuales para tratar las lesiones físicas, dependiendo del tipo, la localización y la fase de la lesión. Estas técnicas incluyen las siguientes:
- Técnicas estructurales: se aplican sobre el sistema músculo-esquelético, mediante movimientos de tracción, compresión, rotación o deslizamiento, para corregir las disfunciones articulares, musculares y óseas. Estas técnicas pueden ser de alta o baja velocidad, y de alta o baja amplitud, según la intensidad y el rango de movimiento que se emplee.
- Técnicas viscerales: aplicables sobre los órganos internos, mediante movimientos de presión, bombeo o liberación, para mejorar la movilidad y la funcionalidad de las vísceras. Estas técnicas pueden tener efectos positivos sobre el sistema digestivo, respiratorio, urinario, reproductor, endocrino e inmunológico.
- Técnicas craneales: se aplican sobre el cráneo, mediante movimientos de palpación, percusión o inducción, para favorecer el movimiento del líquido cefalorraquídeo y la movilidad de los huesos craneales. Estas técnicas pueden tener efectos positivos sobre el sistema nervioso central, el sistema nervioso autónomo, el sistema endocrino y el sistema sensorial.
Consejos para una correcta recuperación de lesiones físicas con osteoterapia
La osteoterapia es una terapia complementaria que puede ayudar a la recuperación de lesiones físicas, pero no es suficiente por sí sola. Para lograr una recuperación óptima, es necesario seguir una serie de consejos, como los siguientes:
- Acudir a un osteópata cualificado y con experiencia, que realice un diagnóstico adecuado y un plan de tratamiento personalizado.
- Seguir las indicaciones del osteópata, tanto en cuanto a la frecuencia y la duración de las sesiones, como en cuanto a los ejercicios y las pautas a realizar en casa.
- Combinar la osteoterapia con otras terapias, como la fisioterapia, la electroterapia, la crioterapia, la termoterapia, etc., según las necesidades de cada caso.
- Mantener una alimentación equilibrada y saludable, que aporte los nutrientes necesarios para la regeneración de los tejidos y la prevención de la inflamación.
- Hidratarse adecuadamente, para facilitar la eliminación de toxinas y la circulación de los fluidos corporales.
- Descansar lo suficiente, para favorecer la recuperación y la reparación de los tejidos y el sistema nervioso.
- Evitar el estrés y las emociones negativas, que pueden afectar al sistema inmunológico y al proceso de curación.
- Retomar la actividad física de forma progresiva y adaptada, respetando los tiempos de recuperación y evitando los movimientos bruscos y las sobrecargas.