El cuerpo y la mente se erosionan con el paso del tiempo. Es una realidad. Nuestro organismo envejece y poco a poco vamos notando cómo el paso de los años nos afecta en mayor medida, pero eso no implica que no podamos frenar ese envejecimiento y mantenernos sanos incluso en edades avanzadas.
¿Quién dijo que los hombres y las mujeres se vienen abajo a partir de los 50? Esa creencia es una falsedad absoluta porque, con solo conocer algunos pequeños trucos y ser algo perseverantes, podemos disfrutar de una fortaleza, una alegría y una salud de hierro a partir de los 50 años. Te vamos a contar cómo es posible lograrlo.
Claves para una salud de hierro a partir de los 50
Porque a partir de los 50 años puedes disfrutar de los grandes placeres de la vida sin tener que preocuparte de enfermdades ni achaques. Hay que mantener ciertas pautas para tener una buena salud a partir de los 50, aunque en realidad no se alejan mucho de las pautas habituales para gozar de una buena salud. Sí, hay que tener algo más de cuidado, y no viene mal contar en casa con algunos preparos extra como los tensiómetros de muñecas o algunos tests médicos. Pero, como podrás ver, la lozanía se puede mantener por encima de los 50 años con una rutina muy sencilla y saludable:
Cuida tu dieta y elimina los vicios
Dile adiós al tabaco y reduce al máximo el alcohol en tu rutina diaria. Para tener una salud de hierro hay que hacer pequeños sacrificios y decir adiós a estos vicios es uno de los más importante. A partir de cierta edad, sus efectos son todavía más perniciosos, y más si llevas acudiendo a ellos durante muchos años.
Puede que te sea difícil, pero intenta abandonarlos de forma progresiva y ve introduciendo otras rutinas en tu día a día para que ni tu cuerpo ni tu cabeza te pidan volver al tabaco o al alcohol. Es cuestión de tiempo y perseverancia, pero, a la larga, tu salud lo agradecerá muchísimo. Garantizado.
No, no debes abandonar el ejercicio
Puede que el ejercicio se te haga cada vez más cuesta arriba, pero debes tomarte eso como un reto, no como una señal de que debes abandonarlo. Prueba a cambiar de deporte, instaura otras rutinas de ejercicios, o busca otras actividades, pero no puedes ni debes abandonar el ejercicio por nada del mundo. Al revés, debe acompañarte siempre que puedas para que tu cuerpo esté en forma.
El sedentarismo suele pasar factura a esta edad, así que intenta que no sea así. Salir a caminar es una práctica sencilla, y aporta mucho. Además, puede ser la puerta de entrada a otro tipo de ejercicios más exigentes que te permitan reforzar y tonificar tu musculatura. Te cuidarás, lucirás mejor y encima harás que tu cuerpo lo agradezca.
Mantén una buena rutina médica
Las rutinas deportivas son buenas, pero las rutinas médicas también. No hablamos de que vayas al médico cada día, sino de que intentes mantener un hábito para ir al menos una vez cada tres meses, o cada seis meses, a hacerte un buen chequeo. Es la mejor forma de comprobar que todo está en orden y de que, en caso de que surja algo, se le pueda poner remedio en el menor tiempo posible.
Si quieres, como parte de esta rutina médica puedes tomarte la tensión o comprobar algunos de tus niveles con algunas de las pruebas disponibles en farmacias. En caso de que no te apetezca salir de casa, siempre puedes aprovechar el Black Friday 2022 y sus ofertas en farmacia y parafarmacia, y hacerte con lo que necesitas para poder hacértelas tú mismo y comprobar que todo está en orden con más frecuencia.
El buen descanso es esencial
Dormir es sagrado. Debes asegurarte de que, cada noche, duermes el mínimo de horas recomendable (en torno a las 7 horas) y asegurarte de que el sueño sea de calidad. Trasnochar no solo facilita la aparición de fatiga, tener un sueño de mala calidad hace que, a la larga, tanto tu salud física como tu salud mental se vean enormemente resentidas.
Si no puedes dormir bien, intenta localizar el motivo. Es posible que tengas que cambiar el colchón, la almohada o incluso tu dieta o agregar un suplemento como la melatonina. Todo influye, incluidas las etapas de más estrés en el ámbito laboral y/o en el personal. Intenta localizar la raíz del problema para remediarlo cuanto antes, porque la escasez y mala calidad del sueño son los peores enemigos del bienestar.
No te olvides de tu vida sexual
Puede parecer un consejo tonto, pero nada más lejos de la realidad. Debes hacer lo posible por mantener una vida sexual activa. Las relaciones íntimas mantienen el cuerpo activo, lo ejercitan y aportan muchísimo tanto al bienestar físico como al emocional gracias a la liberación de endorfinas. Por superar los 50 no hay que dejar de disfrutar del placer. Todo lo contrario, hay que saber aprovecharlo más que nunca.
