Si nos ponemos a bucear en diccionarios y enciclopedias, nos encontramos con varias y diferentes definiciones de inteligencia. Así podemos encontrar las siguientes: «Facultad intelectiva con que se captan y forman ideas y se crean relaciones». «Facultad de conocer, la cual se manifiesta de varios modos». «Conocimiento, comprensión, acción y efecto de comprender o entender».
Inteligencia, hoy y antes
El empleo que le damos hoy a la palabra inteligencia no tiene nada que ver con el que se le daba antes del siglo XIX. Durante la mayor parte de la historia se ha utilizado con diferentes sentidos filosóficos, hasta que Herbert Spencer y otros autores comienzan a ocuparse de la inteligencia en el mundo animal y en los seres humanos. Fue Francis Galton, emparentado con Charles Darwin, el que tuvo la idea de medir la inteligencia, aplicando los principios de la evolución al terreno psicológico.
Algunas definiciones de inteligencia
Si buscamos definiciones de inteligencia, formuladas en el pasado siglo, nos encontramos con las siguientes:
Lewis Terman (1921): La capacidad de realizar pensamiento abstracto.
Edward Thorndike (1921): La capacidad de (producir) buenas respuestas desde el punto de vista de la verdad o los hechos.
Colvin (1921): Aprendizaje, o la capacidad para aprender a adecuarse uno mismo al medio.
Pintner (1921): La modificalidad general del sistema nervioso.
Weschler (1958): La capacidad global del individuo para actuar de forma propositiva, para pensar racionalmente y para enfrentarse eficazmente con su medio.
Weschler (1975): La capacidad del individuo para comprender el mundo… y sus recursos, para enfrentarse con sus desafíos.