Según una nueva investigación existen algunos sistemas que sirven para perder peso. Las células grasas llamadas adipocitos marrones ayudan a regular la temperatura corporal convirtiendo los nutrientes ricos en calorías en calor. Este proceso ayuda a prevenir el aumento excesivo de peso y los trastornos metabólicos.
El profesor Alexander Bartelt del Instituto de Prevención Cardiovascular (IPEK) ha dirigido una investigación que ha descubierto un nuevo mecanismo que aumenta la respiración y la actividad metabólica de las células de grasa parda.
En el artículo publicado en EMBOpress se indica que los investigadores esperan que este descubrimiento conduzca a nuevos enfoques que utilicen la grasa parda contra las enfermedades metabólicas.
Sobre el ataque de los adipocitos marrones a los depósitos de grasa
Alexander Bartelt ha dicho al respecto lo siguiente: «Las personas que entrenan su grasa parda mediante la exposición regular al frío son más delgadas y menos propensas a desarrollar diabetes y enfermedades cardiovasculares«.
Lo dicho sirve para evidenciar que la activación de las células quemagrasas hace que las personas pierdan peso. Cuando hace frío, los adipocitos pardos extraen su combustible de la grasa almacenada, ya que la termogénesis requiere muchas calorías.
Las células de grasa parda contienen una gran cantidad de mitocondrias, que son los elementos que actúan como centrales energéticas. En ellas se lleva a cabo la respiración celular. Lo que no se entiende todavía es cómo las células de grasa parda estimulan el metabolismo, lo que redundará en la elaboración de nuevas terapias.
La termogénesis es estimulada por el frío
Bartlet ha dicho: «La alta actividad metabólica de las células de grasa parda también debe influir en la producción de ATP (Adenosín trifosfato), y nuestra hipótesis era que este proceso estaría regulado por el frío«.
En otro estudio realizado en São Paulo (Brasil) un grupo de investigadores identificó el “factor inhibidor 1”, centrado en mantener la producción de ATP en lugar de la termogénesis. El Doctor Henver Brunetta, director de esta investigación, ha dicho: «Aunque hemos encontrado una pieza importante del rompecabezas para comprender la termogénesis, las aplicaciones terapéuticas aún están muy lejos«.
Según el estudio llevado a cabo en Brasil se ha encontrado que la mayoría de las personas utilizan demasiado poco su grasa parda y esta se vuelve latente. Ello sirve para deducir que existen interruptores moleculares que permiten que las mitocondrias de las células de grasa parda funcionen mejor.
Bartelt ha dicho al respecto lo siguiente: «Lo ideal sería que encontráramos nuevas formas, basándonos en nuestros datos, de restaurar también la aptitud de las mitocondrias en las células de grasa blanca, ya que la mayoría de las personas tienen muchas, si no demasiadas«.
Conclusión
Habrá que seguir investigando con el fin de obtener resultados más precisos, pero es evidente que lo que se ha encontrado puede servir para perder peso. El quemar calorías es fundamental para conseguirlo y, según lo especificado en ambas investigaciones, existen formas naturales para conseguirlo.
