La historia no es actual, ocurrió hace ya algún tiempo. Ello no implica que no pueda traerla aquí de nuevo, porque lo que importa es el problema. Solo hay que poner en acción nuestras capacidades lógicas para resolverlo. ¿Te animas?
Mi hijo Manuel quiere salir esta noche. Para financiarse la salida me pide cincuenta euros. Tal vez debido a una cuestión de deformación profesional, le propongo que, para conseguir el billete, resuelva el siguiente problema:
Preparo tres pequeñas cajas: una blanca, otra verde y una tercera roja. Introduzco los cincuenta euros en una de las cajas. Sobre la tapadera de la blanca escribo: «El billete está en esta caja«, sobre la de la verde: «El billete no está aquí» y sobre la de la roja: «El billete no está en la caja blanca«.
Le explico que de los tres enunciados solo uno es verdadero. ¿Qué caja debe escoger mi hijo Manuel?
_______________________
Solución
Los que no sean capaces de resolver el problema o quieran comprobar si su solución es válida, pueden leer lo que viene a continuación:
La caja blanca dice justo lo contrario de la roja. Cómo solo hay un enunciado verdadero, ha de ser uno de estos dos. Por lo tanto lo que está escrito en la caja verde es mentira. Así que el billete está en la caja verde.