Según lo que nos cuentan en radware el número de ataques DDoS en la web ha experimentado un incremento del 550 por ciento en el pasado año con respecto al año anterior, a 2023. En el citado 2023 el número de los ataques en la red de redes había aumentado un 37 por ciento.
Por lo que se ve los riesgos en Internet continúan activos. En el informe se muestra un crecimiento interanual de casi el 400 por ciento en el volumen de ataques DDoS contra las finanzas y el transporte. También se está produciendo un ataque masivo contra las webs gubernamentales. Ucrania fue el país más atacado por los hacktivistas con 2.052 ataques reivindicados, seguido de Israel con 1.550.
Sobre los ataques DDoS
Los ataques DDoS se refieren a una denegación de servicio, un ciberataque en el que sobrecarga un sitio web, un servidor o un recurso de red con una gran cantidad de peticiones. Con ello, el que sufre el ataque se bloquea, lo que trae consigo que se deniegue el servicio a los usuarios legítimos.
Pascal Geenens, director de inteligencia de amenazas de Radware, ha dicho lo siguiente sobre los ataques sufridos en 2024: «La revolución de amenazas que vimos en 2024 se ha visto impulsada por múltiples catalizadores, entre ellos conflictos geopolíticos, amenazas más grandes y complejas y
amenazas más sofisticadas y persistentes«.
Ha añadido lo siguiente: «Si a eso le sumamos el impacto de la IA, que está reduciendo las barreras de entrada, multiplicando el número de adversarios y permitiendo que incluso los actores novatos lancen campañas maliciosas con éxito, tenemos un panorama de amenazas que parece muy desalentador«.
A tener en cuenta
La duración promedio de los ataques se incrementó en un 37 por ciento con respecto a 2023. Se sabe además que el volumen promedio de ataques mitigados aumentó un 120 por ciento en comparación con 2023.
Pascal Geenens ha dicho además lo siguiente: «La escalada del panorama de amenazas tiene implicaciones significativas para todos los sectores, desde las finanzas y las telecomunicaciones hasta el gobierno y el comercio electrónico, entre otros. Las organizaciones operan en un entorno dinámico que exige estrategias de defensa igualmente dinámicas. Si bien los actores maliciosos no tienen que hacer su trabajo a la perfección para tener un impacto importante, los defensores sí lo hacen«.
Conclusión
Está claro que los riesgos cada vez son mayores. Los sectores más afectados son los de las telecomunicaciones, el financiero, el transporte, el comercio electrónico y los proveedores de servicios. Ello significa que habrá que tomar medidas para que los incrementos en los ataques DDoS se frenen, se impida, por lo menos, que continúe el avance de los mismos.
