Como todo en esta vida, reparar un cajero automático tiene su intríngulis. Cualquier usuario, después de una avería y posterior arreglo, no puede ser víctima de fallos que repercutan en su economía, ni aprovecharse de agujeros producto de errores tecnológicos. Este último no es el caso que nos ocupa sino mas bien el primero, un avispado reparador de cajeros automáticos se aprovechó de su trabajo específico para cambiar billetes reales por falsos.
Al final fue descubierto. Cambió 200.000 dólares en billetes falsos por dinero real en siete sucursales bancarias, seis en San Francisco y una en Daly City, en Estados Unidos. Las denuncias presentadas por parte de varios clientes en las oficinas bancarias fueron el punto de partida de la investigación. Samuel Klioski, de 64 años y vecino de San Francisco, fue detenido diez meses después de haberse cometido los robos (más bien cambios de cromos). El pasado día 10, en un control de tráfico rutinario los agentes lo detuvieron en Phoenix.
Según cuentan en el San Francisco Chronicle las falsificaciones no eran muy cuidadas, simples fotocopias en color de billetes de veinte dólares. Las cámaras de seguridad de los cajeros sirvieron para descubrir al delincuente que, aprovechándose de su trabajo, pretendía engañar a los ciudadanos de a pie. Un día fue suficiente para cometer su fechoría. Después de terminar su trabajo, abandonó a su mujer y desapareció, hasta que casi un año después la policía lo encontró de casualidad. El destino nunca perdona.