Lo han bautizado con ese nombre. El vehículo, del que se sabe que es de color azul, se encontró abandonado en una calle de la ciudad de Huayang, en China. Alguien vio un conjunto de ramas y hojas estratégicamente colocadas encima de un objeto (al parecer nacieron y se desarrollaron allí), que resultó ser un coche. Los vecinos del barrio llevaban bastante tiempo observando el engendro, al que bautizaron con el nombre de coche zombie. La apelación no es casual ya que se emplea habitualmente para designar a los coches abandonados en las calles de muchos pueblos y ciudades del país asiático. Lo que distingue a éste del resto es el adorno natural que, a modo de protección, le envuelve.
¿De quién era el coche?
Está claro que su propietario renunció a él hace ya bastante tiempo, han de pasar unos cuantos meses para que crezca tal vegetación sobre su carrocería. El propietario de la camonieta, como hemos dicho y se vislumbra en la foto, de color azul fue localizado por la policía. Les dijo a los funcionarios policiales que había vendido el vehículo hace ya tres años y que no tenía ni idea de donde se encontraba el comprador, había perdido todas sus pistas.
¿Qué hizo la policía?
Después de preguntar si había alguien bajo el follaje, además del vehículo, y no obtener respuesta, los agentes policiales se decidieron a quitar toda la vegetación, pero desistieron de ello tras verse incapaces de hacerlo sin sufrir daños. Tal vez temiesen el ataque del coche zombie, por lo que decidieron engancharlo a una grúa y llevarlo al depósito de vehículos abandonados, es lo que presuponemos.
Las dos imágenes que ofrecemos (aún hay más) y la información para escribir este artículo la hemos encontrado en CBS News, exactamente en ‘Zombie Car’ abandoned in China street, overgrown with ivy. El episodio del coche zombie lleva varios días generando múltiples comentarios en la red social Weibo de China.