Que un perro sea del tamaño de un caballo se sale fuera de lo común. O nos referimos a un perro enorme y a un caballo diminuto, o entonces es imposible contrastar la afirmación que sirve de título a este artículo. Pero por lo que vemos en la fotografía que tenéis arriba, la realidad nos demuestra lo contrario. La pareja de policías montados, sobre perro y caballo, contravienen la realidad. Al menos eso parece, ¿o nos están engañando?
Está claro que sí, que es un montaje, que la foto tiene truco. Nadie conoce un perro de tal tamaño, el que monta el poli de la izquierda. Todos hemos oído hablar de Photoshop, esa famosa aplicación de retoque fotográfico, que convierte, cuando la utilizan manos expertas, lo imposible en posible. No hay duda, alguien ha utilizado la aplicación de Adobe (o similar) y ha cambiado el equino por el perro.
Deduzco que lo ha hecho fusionando elementos de dos fotografías. Ha tomado la que sirve de base, la de los policías a caballo, y otra en la que un hermoso perro era el protagonista de la escena, y ha cambiado uno de los caballos de la primera por el perro de la segunda. Ello requiere ajustes y retoques que sólo son capaces de hacer manos expertas, pero, como vemos, nada es imposible. En la consumación del engaño está la riqueza de la creación, ¿no crees?
La imagen la he encontrado en ese enorme almacén de grandes obras de arte llamado Worth1000 (ahora en DesignCrowd).
Información bien interesante y útil gracias