Cada vez se reciben más mensajes de correo electrónico que solo persiguen un fin: engañar a los que los reciben. Pero el engaño no es banal, ya que lo que tratan es de conseguir datos relevantes que permiten el acceso a cuentas de diferentes tipos. Las cuentas bancarias ocupan los primeros lugares en las pretensiones de los cibercriminales, pero hay más. El phishing es el alma mater de los que se quieren apropiar de lo ajeno.
Sistemas de protección contra el phishing
Si efectuamos un análisis sobre todo lo que incide en esta técnica de ataque podemos destacar los apartados disguientes:
Sobre los ataques de phishing
La forma habitual utilizada por los ataques de phishing se produce en mensajes de correo electrónico en los que los que los envían intentan suplantar la identidad de reconocidas instituciones. En dichos mensajes aparecen los nombres de bancos, entre otros servicios, con el anagrama de los mismos.
Cuando se pulsa sobre el enlace (puede haber más de uno) insertado, éste redirige a una página que no tiene nada que ver con lo que se cree. Para entrar en la misma se piden los datos personales de acceso. Al introducirlos, los ciberdelincuentes los utilizarán para conseguir lo que quieren.
Cómo protegerse contra el phising
Nunca debemos confiar en los mensajes de correo electrónico si no sabemos, con certeza absoluta, quien los envía. Si piden en algún momento datos personales, debemos ser tajantes: no proporcionarlos nunca.
Tenemos que saber que ningún tipo de institución solicita datos personales a través del teléfono o del correo electrónico. Si por algún motivo pulsas sobre el enlace incluido en el mensaje, comprueba, cuando se abre la página de envío, que no se corresponde con la de la entidad que ha enviado el mensaje. Para ello solo hay que examinar la dirección, la URL, que aparece en el navegador web.
Qué hacer si caemos en la trampa
Si por algún motivo caemos en la trampa y nos damos cuenta de ello, debemos ponernos lo antes posible en contacto con los organismos competentes, la Policía Nacional y/o la Guardia Civil, y explicarles lo que nos ha ocurrido.
Además de lo indicado debemos informar a la entidad que figura en el mensaje, como productora del mismo, de lo que nos ha ocurrido. De esta forma colaboraremos a la hora de conseguir que los citados mensajes de phishing dejen de propagarse.
A tener en cuenta
Si nos damos una vuelta por la web podemos encontrar interesante información sobre el tema. No dudemos en leer lo que se nos muestra y de actuar en consecuencia.
En Batiburrillo.net hemos escrito más de un artículo sobre el tema. Solo tenemos que pulsar sobre el enlace que os proponemos a continuación para encontrar información: phishing.