Muchos niños y adolescentes sufren con relativa frecuencia dolores de cabeza. Uno de los motivos es el no desayunar como deben. Además, según un reciente estudio, publicado en la revista Neurology, relacionado con el uso de cigarrillos electrónicos y a la exposición del humo que producen también provocan dichos dolores. Se han detectado varios casos en muchachos con edades comprendidas entre los 12 y los 17 años.
Sobre la investigación
La doctora Serena L. Orr, MD, MSc, de la Universidad de Calgary en Canadá y miembro de la Academia Estadounidense de Neurología, ha dicho lo siguiente: «No es raro que los niños y adolescentes tengan dolores de cabeza, y si bien se usan medicamentos para detenerlos y, a veces, prevenirlos, los cambios en el estilo de vida también pueden ofrecer una ruta eficaz hacia el alivio al prevenir que se produzcan dolores de cabeza y mejorar la calidad de vida«.
En la investigación participaron alrededor de cinco millones de niños y adolescentes, con edades comprendidas entre los 5 y los 17 años. Se les hizo una encuesta en la que se les preguntó si habían sufrido dolores de cabeza durante los seis meses anteriores y con qué frecuencia. El 6% de los participantes los sufrieron más de una vez cada semana.
En la encuesta se les preguntó el tiempo que pasaban delante de la pantalla o pantallas, las horas que pasaban durmiendo, y las comidas que realizaban. Se analizaron los estados de ansiedad y de ánimo. A los que tenían entre 12 y 17 años se les preguntó también el tiempo que permanecían expuestos a determinadas sustancias.
Los dolores de cabeza y el estilo de vida
Se comprobó que los que comían de manera normal, que desayunaban y cenaban regularmente, tenían un menor riesgo a la hora de padecer dolores de cabeza. En cambio, los que comían varias veces al día, sin ningún control, les dolía más la cabeza.
Se descubrió también que el 8% de los que sufrían dichos dolores consumían alcohol, cigarrillos tradicionales, cigarrillos electrónicos y cannabis. Los investigadores encontraron que aquellos que usaban cigarrillos electrónicos a diario tenían el doble de probabilidades de sufrir dolores de cabeza frecuentes en comparación con aquellos que nunca usaban estos productos.
Conclusión
La doctora Serena L. Orr dijo al respecto: «Evaluamos la ansiedad y los trastornos del estado de ánimo porque se han relacionado con dolores de cabeza y pueden afectar los hábitos de vida. Es posible que las comidas familiares regulares puedan generar una mayor conexión y comunicación dentro de la familia, y mejores resultados de salud mental, lo que a su vez puede afectar la frecuencia de los dolores de cabeza«.
Añadió lo siguiente: «Nuestros hallazgos sugieren que preguntar sobre factores del estilo de vida, como el abuso de sustancias, puede ayudar a los profesionales médicos a identificar intervenciones en el estilo de vida que pueden ser útiles para los jóvenes y ayudar a reducir los dolores de cabeza frecuentes«.
No hay dudas de que los estilos de vida influyen notablemente en el desenvolvimiento de todas las personas. Cuando se tienen pocos años la incidencia aún es mayor. Por ello es muy importante el que los padres y tutores controlen lo que hacen los menores que tienen a su cargo.
