Actúan como bots, como robots que crean mensajes cada cortos periodos de tiempo y los publican en cuentas de notable solvencia. Nos referimos a Instagram, la conocida red social dependiente de Facebook que se ocupa de mostrar fotografías de personas famosas como elementos primordiales en su estructura, con el fin de que los usuarios, además de verlas, las valoren y, al mismo tiempo, disfruten, en muchos casos, de mensajes publicitarios.
Se acaba de comprobar que en estos momentos hay cerca de 95 millones de cuentas falsas, amparadas en bots, que infectan a Instagram. Son los resultados de un estudio que se ha ocupado en llevar a cabo este análisis. Según nos cuentan en TechViral, una empresa italiana llamada Ghost Data ha llevado a cabo el estudio. Y las conclusiones muestran algo altamente alarmante, estamos invadidos por las falsedades, por las mentiras, centradas sobre todo en las redes sociales. Hace tan solo dos días lo decíamos en El sin sentido de las fake news o noticias falsas.
Hablamos de 95 millones de cuentas, lo que corresponde al 9,5% de todas las cuentas activas por mes en Instagram, un número nada despreciable. Por lo que se ve, a pesar de todos los esfuerzos, Facebook no es capaz de solucionar este notable problema.
Según Ghost Data, muchas cuentas populares de Instagram poseían una gran cantidad de seguidores encuadrados en el grupo citado. Muchos de sus seguidores son falsos, no existen, se trata de scripts que se ocupan de realizar su labor de manera automática.
¿Qué sentido tiene la existencia de estos bots? El primero y más destacado es inflar el número de seguidores de usuarios reales. A partir de ahí, generarán mensajes que harán que otras personas participen emitiendo sus comentarios. En una gran cantidad de casos lo que hacen estos bots es crear noticias o mensajes falsos, ya que es muy complicado detectar los textos que acompañan a las imágenes y valorar su certeza.
Además de encontrar contenidos que dañan a personas y entidades, las redes sociales deben también ocuparse en detectar estos bots y eliminarlos. Pero ello es una labor muy complicada, debido a como están configurados los sistemas que soportan las redes sociales.
Aunque los responsables de Facebook han dicho en más de una ocasión que han tomado, y están tomando, muy en serio todo lo relacionado con los mensajes basura, hasta ahora no han encontrado las medidas adecuadas para combatirlos. Está claro que el problema, a pesar de todos los esfuerzos, aún no está controlado.