Cuando se llega a una determinada edad existen muchas posibilidades de padecer demencia. Actualmente están activas unas cuantas investigaciones destinadas a evitar que el nivel de la misma se incremente. El último estudio en este terreno indica que existen siete hábitos que pueden ayudar a reducir el riesgo de demencia.
Los sietes factores o hábitos enfocados en la salud cardiovascular y cerebral son los siguientes: mantenerse activo, comer de forma saludable, perder peso, no fumar, mantener una presión arterial adecuada, regular el colesterol y reducir el azúcar en la sangre.
Información sobre el estudio
Adrienne Tin, directora del estudio, ha dicho lo siguiente: «Estos hábitos saludables en Life’s Simple 7 se han relacionado con un menor riesgo de demencia en general, pero no está claro si lo mismo se aplica a las personas con un alto riesgo genético. La buena noticia es que incluso para las personas que tienen el riesgo genético más alto, es probable que tener el mismo estilo de vida más saludable tenga un menor riesgo de demencia«.
Para llegar a las conclusiones señaladas se hizo un estudio con varias personas de origen europeo y otras de origen africano. Se establecieron puntuaciones de 0 a 14, de un estado saludable menor a uno mayor. Las personas de ascendencia europea obtuvieron una puntuación media de 8,3, mientras que las personas de ascendencia africana obtuvieron una puntuación media de 6,6.
El genoma del Alzheimer fue el elemento primordial en el inicio y valoración del estudio. Aunque se obtuvieron interesantes resultados, Adrienne Tim dijo lo siguiente: «Se necesitan tamaños de muestra más grandes de diversas poblaciones para obtener estimaciones más confiables de los efectos de estos factores de salud modificables en el riesgo de demencia, dentro de diferentes grupos de riesgo genético y antecedentes ancestrales«.
A tener en cuenta
Los participantes con ascendencia europea se dividieron en cinco grupos y los de ascendencia africana se dividieron en tres grupos según las puntuaciones de riesgo genético. El grupo con mayor riesgo genético incluía a personas que tenían al menos una copia de la variante del gen APOE asociada con la enfermedad de Alzheimer, APOE e4.
De los que tenían ascendencia europea, el 27,9 % tenía la variante APOE e4, mientras que de los que tenían ascendencia africana, el 40,4 % tenía la variante APOE e4. El grupo con el riesgo más bajo tenía la variante APOE e2, que se ha asociado con una disminución del riesgo de demencia.
Conclusión
La mayoría sabemos que el Alzheimer es una enfermedad que convierte a las personas que la padecen en seres incapaces de realizar las actividades típicas de los seres humanos normales. Se olvidan de todo, del presente y del pasado, y no son capaces de vivir.
Fuente: Neurology