El arte engloba una gran cantidad de campos y de estados. Algunas personas, hombres y mujeres, dando rienda suelta a su imaginación, son capaces de elaborar, a partir de todo tipo de elementos, obras que se pueden encuadrar dentro del arte. No importa ni el origen ni los resultados, ni que guste a muchos o a una minoría, sólo hay que comprobar si son capaces de despertar en nosotros un interés especial, de dejarnos una huella, profunda o superficial, en nuestro espíritu.
La plasmación de un instante
Ocurre en más de una ocasión, pero no llega a consumarse en la mayoría de los casos. Te está chinchando, acabando con tu paciencia. Tienes un vaso de whisky en la mano y… sigue, sigue… Le dices que se calle, que deje de incordiar, pero no te hace caso. Le adviertes que le vas a lanzar el contenido del vaso a la cara, pero continúa molestando, chinchando… Sigue erre que erre.
Los resultados ya los veis. El fotógrafo estaba allí, con la cámara en ristre, preparada para captar el momento. No es una cámara cualquiera, es de esas que son capaces de inmortalizar hasta la millonésima de segundo, de parar el tiempo. Y ahí quedó el instante plasmado para la posteridad.
La imagen pertenece a la colección que tiene en Flickr Avi_Abrams. Es del año 2007.