Nuevos estudios corroboran la relación existente entre infecciones producidas en el organismo y posteriores trastornos en el estado de ánimo. Tras una enfermedad en la que se implican virus y bacterias surgen, cuando ésta cesa, desequilibrios en el humor, provocando en las personas mal genio y estados similares. Las conclusiones están reflejadas en una tesis doctoral publicada en Dinamarca.
Infecciones y estados de ánimo
Tal como explica Michael Eriksen Benrós, MD y PhD de la Universidad de Aarhus y del Centro Psiquiátrico de Copenhague, «nuestro estudio muestra que el riesgo de desarrollar un trastorno del estado de ánimo se incrementa en un 62% para los pacientes que han sido ingresados en el hospital con una infección. En otras palabras, parece que el sistema inmune está involucrado de alguna manera en el desarrollo de los trastornos del estado de ánimo».
El estudio se ha desarrollado desde el año 1997 al 2010 con tres millones de personas que vivían en el país nórdico. De éstas, alrededor de 91.000, tuvieron que asistir a una clínica con el fin de ser tratados por trastornos en el estado de ánimo. De ese grupo, el 32% de los pacientes habían sido ingresados debido a una enfermedad infecciosa y el 5% con una enfermedad autoinmune.
Aunque el cerebro se cree que está protegido ante todo tipo de infecciones, tras esta investigación se deduce que no es totalmente impermeable y que se ve afectado. Habrá por tanto que seguir investigando sobre los mecanismos que establecen las conexiones entre el sistema inmune y los trastornos del estado de ánimo, con el fin de frenar las incidencias.
Visto en Medical Xpress