Son los riesgos que entrañan las redes sociales y servicios adosados, como es el caso de Instagram que, tras comenzar siendo una simple aplicación para dispositivos móviles destinada a la modificación de fotografías, sobre todo aplicando filtros, se ha convertido en una espacio de alojamiento para todo tipo de imágenes que incluye todo lo necesario para compartir, comentar y valorar los contenidos. Desde hace tiempo Instagram está ligado a Facebook y, aunque sus métodos de protección impiden la publicación de pornografía, ahora los responsables del servicio están tomando medidas que impidan la subida de material potencialmente sensible, tal como nos hacen saber en Techcrunch.
Este material potencialmente sensible no podría calificarse en principio como algo que va en contra de las reglas establecidas. Por ello. la red social muestra una pantalla borrosa en la que se incluye, en la parte superior de los mensajes, el letrero «contenido sensible». Ello significa que los mensajes insertados se consideran ofensivos para los usuarios, pero aún no llegan a vulnerar las reglas establecidas.
De lo anterior se desprende que Instagram pretende resolver las protestas de unos cuantos usuarios que no están conformes con lo que otros publican, sobre todo en el campo de los textos añadidos a las imágenes y en los comentarios, pero que no son suficientes para vulnerar los sistemas de protección. La pantalla borrosa será un modo de advertencia para que los autores de las publicaciones lo tengan en cuenta y cuiden su lenguaje.
Otra actualización muy importante es la autenticación de dos factores para la mayoría de los usuarios, algo que hasta ahora solo estaba activa para una minoría. Con este sistema, la protección de las cuentas será mayor, ya que no solo basta con introducir el nombre de usuario y la contraseña sino que también será necesario incluir, por ejemplo, el código enviado al teléfono móvil del usuario. Para ello hay que activar la opción de autenticación de dos factores en la cuenta de usuario. De esta forma el hackeo de cuentas será más complicado.
Con los filtros aplicados para controlar el «contenido sensible» Instagram tratará, además de lo ya indicado, de evitar la proliferación del spam, y de proteger los perfiles personales.