Esta historia, en la que se habla de una carta muy especial, me llegó de Argentina hace ya algunos años. La he rescatado del fondo del baúl, en donde estaba perdida. Durante la lectura descubrimos que el corazón de la madre quiere salir disparado del pecho. Por su mente pasan, una tras otra, imágenes terroríficas… Y en todas está su hija querida. ¿Cuál será el final?
La madre entra al cuarto de su hija, y al ver una carta sobre la cama piensa lo peor. La lee con las manos temblorosas:
Mamá: Con gran pesar te informo que huí de la casa con Juan, mi nuevo novio. Estoy enamorada, el es «relindo» en todo y con sus `piercings`(aretes en el cuerpo), tatuajes y con aquella moto. Pero no es sólo eso, mamá …estoy embarazada, pero el dice que seremos muy felices en su trailer. Juan quiere tener más hijos conmigo, y eso es lo que siempre soñé. Ya aprendí que la marihuana no le hace mal a nadie, y por eso nunca va a faltar en nuestro hogar. El cree que la cocaína o el éxtasis también pueden fortalecer nuestro carácter y relación, por lo que empezaremos a usarlas pronto. Juan asegura que viviremos en perfecta armonía con nuestros hijos y con toda la bola de amigos. Así mismo, rezamos para que se encuentre pronto la cura del sida y así el pobre deje de tomar tantas pastillas. No te preocupes mamá, tengo 17 años y me se cuidar bien. Un día volveré para que conozcas a nuestros hijos. Te dejo un gran abrazo y hasta un día de estos.
Tu hija que te quiere, Maria.
P.D. Mami , no te asustes. ¡Todo es mentira!, estoy en casa de mi amiga Mariana. Sólo quería demostrar que hay cosas peores que las calificaciones de la escuela. Por cierto, están encima de tu buró.
