Industrias como la industria de la alimentación tiene como reto principal mantener la calidad y seguridad de sus alimentos. Podemos verlo en estas industrias y en sectores que están relacionados directamente con la alimentación, incluso en restaurantes con comida para llevar o caterings. Para poder mantener esta calidad, se apuesta por embalajes adecuados. Si bien es cierto que hay gran variedad de opciones, las bolsas de papel kraft se perfilan como una opción ecológica y biodegradable, al mismo tiempo que garantizan la higiene y la conservación de todos los productos alimenticios que se guardan en su interior.
Las bolsas de papel kraft
Podemos hablar primeramente de este producto en cuestión. Son bolsas de papel que se perfilan como ecológicas y biodegradables, ideales para almacenar determinados alimentos, ya sea en su proceso de procesado o ya cocinados. La mayoría de estas bolsas se caracterizan por contar con diseños limpios y prácticos, además de ser muy fácil de transportar. Esto hace que en servicios concretos como el delivery o el catering sean también una apuesta segura. Son envases resistentes que pueden soportar una cantidad de peso grande, incluso es posible introducir en ellas bandejas, algo clave en restauración y catering.
Bolsas de papel e higiene y seguridad
No podemos negar que la higiene y la seguridad son dos factores clave dentro de la industria alimenticia. Las bolsas de papel pueden ofrecer muchas ventajas en este aspecto.
Una bolsa de papel kfrat funciona como barrera ante los contaminantes. Protegen los alimentos ante la exposición de los agentes externos tales como humedad o luz solar. Esto hará que se evite la alteración de la calidad y sabor del alimento en cuestión.
Cuando hablamos de alimentos que pueden contener grasa, estas bolsas también pueden funcionar bien; y es que es posible adquirir bolsas con papel especialmente tratado. Minimizan los riesgos de filtraciones y evitarán, además, que esos alimentos grasos se adhieran a la superficie de la bolsa, algo que también podría comprometer la higiene así como la presentación.
Por otro lado, estas bolsas de papel también tienen capacidad de transpiración. Esto es especialmente útil cuando hablamos de productos secos como puedan ser frutas o verduras. Ayudarán a prolongar la vida útil y los mantendrán frescos durante muchísimo más tiempo.
Mención especial merece el control de la humedad que hacen. Esta humedad es un factor extremadamente crítico cuando hablamos de la frescura de los alimentos. Las bolsas de papel Kraft están diseñadas para controlar esa humedad, evitando así la condensación.
Una opción ecológica
No podemos tampoco negar que las bolsas de papel kraft son la opción más ecológica dentro de la industria alimentaria.
Estas bolsas ecológicas ganan la batalla de la sostenibilidad frente a otras bolsas como las de plástico. Son biodegradables, reciclables y renovables. Esto, en rasgos generales, contribuye a la reducción del impacto ambiental.
Utilizar este tipo de bolsas en industrias alimenticias puede, por tanto, ayudar a crear una imagen de marca comprometida con el medio ambiente, algo que a día de hoy resulta completamente esencial para poder ser competitivo en un mercado al que cada vez se le exige más esta cuestión.
