La crisis, en su insaciable misión devoradora, actúa sin tino ni control en múltiples zonas de nuestra sociedad, originando gastos sin sentido. El consumo incontrolado en épocas de bonanza salen ahora a la luz. Los sueldos de personas pertenecientes a algunos estamentos suponen un enorme despilfarro. En este grupo hay que incluir la inasumible sangría que aqueja a las autonomías en España. No se pueden mantener desembolsos, por parte del Estado, que lo único que hacen es intensificar la quiebra.
Acabamos de descubrir en La Voz de Galicia que los diputados del Parlamento gallego sólo tributan por el 40% de su salario. ¿Por qué el resto de los ciudadanos no disfrutamos de ese privilegio? Pero aún hay más, el salario de nuestros representantes políticos (el informe que corresponde a Galicia se puede exportar al resto de las autonomías) no tiene desperdicio:
- Su asignación fija mensual es de 1.942,95 euros.
- Los gastos mínimos de representación ascienden a 280,91 euros.
- Los gastos de alojamiento y manutención, se consuman o no, es de 2.587,38 euros si los diputados tienen dedicación exclusiva y de 2.349,31 si no la tienen.
Si hacemos la suma obtenemos un total bruto de 4.811,24 euros mensuales para los que disfrutan de dedicación exclusiva y de 4.573,17 para los que no la tienen. Pero aún hay más. En función del cargo que desempeñen estos son los complementos a añadir a los emolumentos anteriores:
- Presidencia del Parlamento: 4.502,76 €,
- Vicepresidentes (dos), secretario y vicesecretario: 3.406,80 €.
- Portavoces de los grupos políticos: 911,96 €.
- Viceportavoces (dos por cada grupo político): 466,34 €.
- Presidentes, vicepresidentes y secretarios de las comisiones parlamentarias: 280,91 €.
Las dietas y locomoción suponen 0,36 € por kilómetro para cada diputado. Si hay desplazamientos dentro de España reciben 112,02 € por día, y si es al extranjero, de 186,69 € diarios.
Ante estos datos, se nos ocurren algunas preguntas: ¿Por qué los ciudadanos de a pie tenemos que asumir toda la crisis? ¿Por qué los ajustes se hacen sólo sobre el sueldo de los funcionarios y sobre las prestaciones de desempleo? ¿Por qué Sanidad y Educación tienen que asumir la mayoría de los recortes? ¿Por qué los empleados de todo tipo tendrán que, tal como recomienda el BCE, ver disminuido su sueldo al propugnarse una bajada en el salario mínimo?