La magia ha existido desde siempre, existe y seguirá existiendo per omnia secula seculorum (por los siglos de los siglos). Como todo ha evolucionado y sigue en ese proceso de adoptar nuevas formas, de conquistar espacios hasta ahora desconocidos. Gracias a la magia descubrimos lo que permanece oculto, avivamos nuestra mente con el fin de averiguar lo que encierran los trucos, intentamos encontrar el por qué de lo que está ocurriendo en el escenario. Gracias a la magia disfrutamos, nos ilusionamos, rompemos con la realidad para sumergirnos en otros mundos, aunque sólo sea durante unos instantes.
La era digital, la tecnología, también se ha subido al carro de la magia. Una prueba de ello es el vídeo que os ofrecemos, en donde el mago combina el mundo virtual con el físico, funde en un único elemento lo que está dentro de la pantalla del iPad con lo que se encuentra en el exterior, lo que tiene entre sus manos o se aloja en la habitación. Hasta es capaz de beber lo que otro tiene en un vaso, o de bañar a dicho individuo con un vaso de leche. La magia ya está en la era digital.