Lo mío no es la Filosofía, ni nunca lo fue. Pero recuerdo cuando compré una edición de Alianza Editorial, los expertos dicen que es la mejor versión (no está manipulada), de la obra cumbre de Friedrich Nietzsche. En aquellos tiempos, hace ya bastantes años, la leía a sorbitos. Hace algún tiempo he vuelto a saborearla. Os ofrezco algunas pequeñas dosis, algunos profundos pensamientos, para que las degustéis. Leedlos con calma, con paciencia.
Algunos extractos de «Así habló Zaratustra»
… Dormir no es arte pequeño: se necesita, para ello, estar desvelado el día entero.
Diez veces tienes que superarte a ti mismo durante el día: esto produce una fatiga buena y es adormidera del alma.
Diez veces tienes que volver a reconciliarte a ti contigo mismo; pues la superación es amargura, y mal duerme el que no se ha reconciliado…
… Aquel a quien la llama de los celos lo circunda acaba volviendo contra sí mismo el aguijón envenenado, igual que el escorpión…
… Es más noble quitarse a sí mismo la razón que mantenerla, sobre todo si se la tiene. Sólo que hay que ser bastante rico para hacerlo…
… Cuando estáis por encima de la alabanza y de la censura, y vuestra voluntad quiere dar órdenes a todas las cosas, como la voluntad de un amante: allí está el origen de vuestra virtud…
… La vida es un manantial de placer; pero donde la chusma va a beber con los demás, allí todos los pozos quedan envenenados…
… Siempre hay algo de demencia en el amor. Pero siempre hay también algo de razón en la demencia…
… Amo la libertad, y el aire sobre la tierra fresca; prefiero dormir sobre pieles de buey que sobre sus dignidades y respetabilidades…
… Y todos los poetas creen esto: que quien, tendido en la hierba o en repechos solitarios, aguza los oídos, ése llega a saber algo de las cosas que se encuentran entre el cielo y la tierra…
… ¿No es la vanidad ofendida la madre de todas las tragedias? Pero cuando el orgullo es ofendido, allí brota ciertamente algo mejor aún que el orgullo…
… El avestruz corre más de prisa que el más rápido caballo, pero también esconde pesadamente la cabeza en la pesada tierra: así hace también el hombre que aún no puede volar…
… Hay que aprender a amarse a sí mismo con un amor saludable y sano: a soportar estar consigo mismo y a no andar vagabundeando de una sitio para otro…
… La vida es un manantial de placer: mas para aquel en el cual habla un estómago indigestado, padre de la tribulación, para ése todas las fuentes están envenenadas…
… ¡Es preferible no saber nada que saber mucho a medias! ¡Es preferible ser un necio por propia cuenta que un sabio con arreglo a pareceres ajenos!…
… A las almas frías, a las acémilas, a los ciegos, a los borrachos, a esos yo nos los llamo gente de corazón. Corazón tiene el que conoce el miedo, pero domeña el miedo, el que ve el abismo, pero con orgullo…