El Astro Rey, el que nos proporciona luz todos los días, el Sol, el que suministra la energía necesaria para la vida, es de gran complejidad. La NASA nos regala un vídeo, publicado hace más de un año, en el que se recoge una completa muestra de colores, agrupados en ondas de distinta longitud, captados por el telescopio alojado en el Observatorio de Dinámica Solar en Greenbelt. Podemos observar las notables diferencias de la estrella según la zona de luz mostrada.
Lo que descubre el telescopio del Observatorio de Dinámica Solar
Gracias a dicho telescopio tenemos la impresión de que determinados objetos están muy próximos, aunque se encuentren a grandes distancias de nosotros. De esta forma podemos percibir detalles que nos ayudan a entender mejor su estructura. Pero no sólo eso, también podemos captar longitudes de onda de la luz que no seríamos capaces de ver. De esta forma los científicos pueden descubrir un serie de procesos que, de otra forma, serían imperceptibles.
Colores y materiales
Los colores que nos descubre el telescopio son el reflejo de una amplia gama de longitudes, invisibles a simple vista, y que ahora podemos examinar al reproducir el vídeo. El Observatorio de Dinámica Solar, o SDO con sus siglas en inglés, convierte esas longitudes de onda en un arco iris de colores que los humanos podemos ver. Cada longitud de onda representa diferente material solar, a distinta temperatura, que nos transmite información sobre los materiales que componen el Sol.
Lo que nos dice la NASA
En la página de la NASA que recoge el vídeo y explica los resultados de la experiencia nos hablan del sentido de algunos de los descubrimientos realizados. Así nos explican que «la luz amarilla de 5800 Angstroms emana habitualmente a partir de material de aproximadamente 10.000 grados F (5700 º C), material que conforma la superficie del sol«. O que «la luz ultravioleta extrema de 94 Angstroms, que normalmente está coloreado en verde en las imágenes SDO, proviene de átomos que están alrededor de 11 millones de grados F (6.300.000 grados C), y es una buena longitud de onda para observar las erupciones solares, que pueden alcanzar temperaturas tan altas«.
Visto en la Web de la NASA