Aqueja a muchas personas. Nos referimos a los problemas pulmonares. La mayoría de los fumadores se ven aquejados por problemas en sus pulmones, que pueden traer consigo un cáncer. De ahí la importancia de atender a los resultados llevados a cabo por un grupo de científicos de la University College de Londres (UCL) y del Wellcome Trust Sanger Institute.
Según este estudio el dejar de fumar no solo contribuye a evitar nuevos daños en los pulmones sino que también trae consigo la activación de un sistema de regeneración. Las células pulmonares no dañadas reemplazarán a las que lo están y a las que son propensas a producir un cáncer.
Cómo se efectuó la investigación
Para llegar a dicha conclusión los investigadores analizaron las biopsias pulmonares de 16 personas. El grupo estaba constituido por tres adultos fumadores, seis exfumadores, cuatro que nunca habían fumado y tres niños. Lo hicieron con el fin de analizar las mutaciones que se producen en las células cancerosas en función de la edad.
Las mutaciones se producen en relación a la edad, en consonancia con el envejecimiento de las células. Se encontraron células con cambios genéticos en todos los participantes, en especial en los adultos, tanto en los que habían fumado como en los que no lo habían hecho nunca.
Lo más sorprendente es que las células no cancerosas de los fumadores y de los no fumadores presentaban diferentes números de mutaciones. Las personas que había abandonado el tabaco tenían más de cuatro veces más células pulmonares genéticamente sanas, en comparación con las que seguían fumando. Ello significa que éstas, las que habían dejado de fumar, presentaban menos riesgos de padecer un tumor pulmonar.
Lo que nos dice el director de la investigación
El Dr. Peter Campbell, autor principal del trabajo, ha dicho sobre los resultados del mismo: «Lo que es tan emocionante de nuestro estudio es que muestra que nunca es demasiado tarde para dejar de fumar. Algunas de las personas en nuestro estudio habían fumado más de 15.000 paquetes de cigarrillos durante su vida, pero a los pocos años de dejarlo muchas de las células que recubren sus vías aéreas no mostraron evidencia de daños por el tabaco«.
Conclusión
Aún no se sabe en que se basa el proceso de cambio de las células dañadas. Se cree, es una hipótesis, que las células sanas están esperando el momento de entrar en acción, de sustituir a las células dañadas.
Fuente: Wellcome Sanger Institute