Cada vez utilizamos con más frecuencia, durante más tiempo, nuestro teléfono móvil. Está demostrado que ello entraña notables riesgos. No solo las radiaciones emitidas son peligrosas, hay más… Desde que estos dispositivos aparecieron nuestras vidas han cambiado.
No hace mucho tiempo nos veíamos con nuestros amigos y hablábamos con ellos cara a cara, pero ahora lo hacemos a través del teléfono móvil. Pero no solo eso, no hablamos, mejor, nos comunicamos por medio de mensajes escritos.
Según OnePlus, fabricante de dispositivos móviles, se descubrió no hace mucho, tras efectuar una completa encuesta, que uno de cada cuatro adultos en el Reino Unido tiene problemas a la hora de quedarse dormido debido a que pasa demasiado tiempo delante de su teléfono móvil antes de acostarse.
La luz azul emitida por la pantalla de los móviles es de características similares a la emitida por el sol. Se cree que produce alteraciones en productos químicos almacenados en el cerebro. Ello incide en la falta de sueño ya que el cerebro considera que el sol aún está luciendo, lo que trae consigo que todavía no sea posible dormir.
Conclusiones del estudio
Tras el estudio recogido en The Sleep Council se encuentra su directora, Lisa Artis, que ha dicho lo siguiente sobre el problema planteado:
«La luz azul inhibe el sueño porque la longitud de onda corta estimula los sensores en los ojos para enviar señales al reloj interno de su cerebro, engañándolo para que piense que es de día. La luz azul es beneficiosa durante las horas del día, ya que aumenta el estado de ánimo, los tiempos de reacción y la concentración, pero por la noche, la recomendación es evitar el tiempo de pantalla durante una hora antes de acostarse para ayudar a aumentar los niveles de melatonina».
Más incidencia en los jóvenes
En los jóvenes entre 15 y 34 años el problema es aún mayor. El 86% de estas personas pasan varias horas delante de la pantalla del móvil. Y no solo eso, se van a la cama con el móvil encendido, con lo que la incidencia de la luz azul es mayor.
Según OnePlus, en el Reino Unido, el número de personas que tienen problemas para quedar dormidas por culpa de los teléfonos móviles ronda los 12 millones.
Un problema de difícil solución
No es el único estudio realizado sobre el tema. En otro se ha comprobado que muchas personas pasan más de tres horas y media cada día delante del móvil. Ello convierte a estos dispositivos en objetos de adicción. Lo que, evidentemente, es altamente negativo.
Todos sabemos lo que son las adicciones. Su adquisición es muy fácil, pero desprenderse de ellas es muy difícil y, en la mayoría de los casos, no se puede conseguir sin ayudas externas.
Nuestra recomendación ya sabes cuál es: no te vayas a la cama con tu teléfono móvil, déjalo apagado en la sala. Y mejor, deja de utilizarlo al menos una hora antes de acostarte.