Todos los seres que poblamos este inmenso espacio que llamamos Tierra, necesitamos comer. Sin alimento no hay vida, por ello el conseguir comida es la razón de ser de la lucha diaria. Los humanos que disponemos de los medios adecuados, no le damos importancia a esta acción, porque sabemos que cuando lleguemos a casa tendremos la mesa puesta o, tal vez, tengamos que preparar los manjares, pero sólo hay que entrar en la despensa o abrir el frigorífico para conseguir la materia prima. Las personas que viven en la miseria, que no disponen de los medios necesarios, tienen, como preocupación principal cada día, el conseguir el alimento que necesitan.
Lucha por sobrevivir
¿Y los animales, que ocurre con esos seres que también se asientan sobre la Tierra y que, como nosotros, necesitan comer? Si no los tenemos adoptados como mascotas o no los encerramos en granjas con fines productivos, deberán luchar por conseguir el alimento diario. En ocasiones lo harán entre ellos, a veces hasta la muerte, para conseguir lo que necesitan. La imagen que me ha inspirado para escribir este artículo, es una muestra de esa lucha.
Ganador y perdedor
¿Quién ganará, la de la derecha o la de la izquierda? Lo que sí ya sabemos es la que ha perdido, la de la familia de los himenópteros. Ella va a ser devorada. Va a llegar al estómago de una o de ambas, entera o partida. Así es la vida.
Fotógrafo al quite
Para captar esta imagen, el fotógrafo, además de estar allí, pulsó el botón en el instante preciso, justo antes del banquete. Si podemos llamar banquete a lo que se vislumbra.