Eso es lo que nos preguntamos todos… ¿Por qué se paró el coche? No tiene mucho sentido, se le ve lustroso y boyante, con la carga justa. Las bananas pesan muy poco. Para transportarlas se necesita un vehículo sin grandes pretensiones. «Hombre el coche, no es muy nuevo, está ligeramente oxidado, con las puertas desvencijadas. Para mi va un poco cargado», me dice un amigo que tengo a mis espaldas y que está viendo la foto. Si he de ser sincero, aunque no estoy totalmente de acuerdo con él, algo de razón tiene. Pero el que el engendro vaya como va y esté como está no explica el que se haya parado. ¿No lo creéis?
El conductor y acompañante acaban de llegar a un cruce y están haciendo un análisis de lo que está escrito en el suelo. El letrero se parece en forma y estructura a uno típico, que se repite aquí y allá, en todos los países del mundo. Recuerdan que la palabra que anima a los conductores a que se detengan es inglesa. Llevan un rato parados, con las bananas sobre sus espaldas, observando, analizando y dudando. «Es lógico que lo hagan», dice mi amigo , «no te has dado cuenta que el letrero está recién hecho. Es una nueva versión del archiconocido Stop«. No tengo más que decir.
Debo aclarar que las fotos las he conseguido en Daily Picks and Flicks, y que aparentemente no tienen relación. Sólo una mente perversa ha sido capaz de urdir lo que está más arriba, de combinar dos imágenes que no están relacionadas, basándose en aquello que algunos repetimos muchas veces: «hay que tomarse la vida con humor».
