Nuestro hogar es nuestro santuario, y por lo tanto nuestro deber/deseo, es mantenerlo siempre lo más limpio posible, lo más saludable posible, de forma que podamos cuidar a los nuestros: a nuestros hijos, parejas, padres, madres, mascotas y a nosotros mismos, principalmente de enfermedades y de toxinas que podrían encontrarse en el aire.
Podemos tomar muchas medidas en nuestro hogar para mejorar la salud, desde una simple limpieza hasta la remoción de materiales peligrosos por parte de profesionales. Estos son algunos tips para mejorar tu salud hogareña y de esta forma cuidar de ti y de tus seres queridos para que, a largo plazo, puedan gozar de una mejor salud.
Remueve el amianto de tus paredes
El amianto o asbesto es un material que antaño se utilizaba para construir casas de fibrocemento y hoy en día se ha prohibido en España y en gran parte del mundo, debido a que se ha relacionado con muchas enfermedades, incluidos varios tipos de cáncer.
Es por ello que, si tu casa es vieja, puedes contratar a una compañía para quitar el amianto de tu hogar lo antes posible, de forma segura, lo cual te ayudará a prevenir enfermedades graves a futuro.
Cultiva plantas de interiores
Las plantas tienen un efecto bastante positivo para el hogar, ya que no son solo bonitos adornos y sacos de boxeo para gatos, sino que también tienen la propiedad de filtrar el aire de toxinas como el benceno que pueden acumularse y causar distintas enfermedades. También eliminan el gas metano y el CO2 y oxigenan tus espacios, lo que, en general, te hará sentir mucho mejor.
También pueden ayudar a eliminar malos olores del ambiente, lo cual hará que tu casa se sienta mucho más como un hogar. Si tienes un terreno más o menos amplio fuera de tu casa, también puedes dedicarte en tus ratos libres a la jardinería, y disfrutar de los beneficios de tener plantas en tu hogar.
Mantén tus espacios ordenados
Si hay algo que contribuye a reducir el estrés son los espacios ordenados. Asegúrate de tener suficientes estantes donde guardar tus cosas y pon en orden las habitaciones de tu hogar. El solo hecho de ver tus espacios ordenados y al mantenerlos libres de polvo, tú y los tuyos empezarán a sentir la diferencia. Hasta los animales estarán más felices y será mucho más fácil recordar dónde está cada cosa.
¿Trabajas en casa? Mantén tu trabajo alejado de tu familia
La pandemia nos ha obligado a asumir muchos nuevos hábitos, esto incluye el trabajo en casa. Si usas esta modalidad para trabajar, asegúrate de tener un espacio que sea solo para ti y que uses solo para trabajar. De esta forma, tú y tu familia sabrán que es un espacio que no debe ser invadido y, aunque de vez en cuando aparezca el gato o el perro para saludar, se reducirá significativamente el estrés en el hogar característico de este tipo de empleos.
Esto reducirá los conflictos con los tuyos y mantendrá un ambiente de armonía. No trabajes en el comedor, en el dormitorio o en la sala de estar, ya que puede ser contraproducente. Si haces esto, además, serás mucho más productivo en el trabajo y te darás el suficiente tiempo de ocio sin que esto interfiera con tu actividad laboral.